Franz Kafka
(Praga, 1883 - Viena, 1924)El silencio de las sirenas
Existen métodos insuficientes, casi pueriles, que también pueden servir para la salvación. He aquí la prueba:
Para guardarse del canto de las sirenas, Ulises tapó sus oídos con cera y se hizo encadenar al mástil de la nave. Aunque todo el mundo sabía que este recurso era ineficaz, muchos navegantes podían haber hecho lo mismo, excepto aquellos que eran atraídos por las sirenas ya desde lejos.
El canto de las sirenas lo traspasaba todo, la pasión de los seducidos habría hecho saltar prisiones más fuertes que mástiles y cadenas. Ulises no pensó en eso, si bien quizá alguna vez, algo había llegado a sus oídos. Se confió por completo en aquel puñado de cera y en el manojo de cadenas.
Contento con sus pequeñas estratagemas, navegó en pos de las sirenas con inocente alegría.
Sin embargo, las sirenas poseen un arma mucho más terrible que el canto: su silencio. No sucedió en realidad, pero es probable que alguien se hubiera salvado alguna vez de sus cantos, aunque nunca de su silencio. Ningún sentimiento terreno puede equipararse a la vanidad de haberlas vencido mediante las propias fuerzas.
En efecto, las terribles seductoras no cantaron cuando pasó Ulises; tal vez porque creyeron que a aquel enemigo sólo podía herirlo el silencio, tal vez porque el espectáculo de felicidad en el rostro de Ulises, quien sólo pensaba en ceras y cadenas, les hizo olvidar toda canción.
Ulises, (para expresarlo de alguna manera) no oyó el silencio. Estaba convencido de que ellas cantaban y que sólo él se hallaba a salvo. Fugazmente, vio primero las curvas de sus cuellos, la respiración profunda, los ojos llenos de lágrimas, los labios entreabiertos. Creía que todo era parte de la melodía que fluía sorda en torno de él. El espectáculo comenzó a desvanecerse pronto; las sirenas se esfumaron de su horizonte personal, y precisamente cuando se hallaba más próximo, ya no supo más acerca de ellas.
Y ellas, más hermosas que nunca, se estiraban, se contorneaban. Desplegaban sus húmedas cabelleras al viento, abrían sus garras acariciando la roca. Ya no pretendían seducir, tan sólo querían atrapar por un momento más el fulgor de los grandes ojos de Ulises.
Si las sirenas hubieran tenido conciencia, habrían desaparecido aquel día. Pero ellas permanecieron y Ulises escapó.
La tradición añade un comentario a la historia. Se dice que Ulises era tan astuto, tan ladino, que incluso los dioses del destino eran incapaces de penetrar en su fuero interno. Por más que esto sea inconcebible para la mente humana, tal vez Ulises supo del silencio de las sirenas y tan sólo representó tamaña farsa para ellas y para los dioses, en cierta manera, a modo de escudo.
_______________________________
«Yo he escrito también algunos cuentos en los cuales traté ambiciosa e inútilmente de ser Kafka.»
JORGE LUIS BORGES
______________________________
Marco Denevi
(Buenos Aires, 1922 - Buenos Aires, 1998)
Silencio de sirenas (1996)
Cuando las Sirenas vieron pasar el barco de Ulises y advirtieron que aquellos hombres se habían tapado las orejas para no oírlas cantar (¡a ellas, las mujeres más hermosas y seductoras!), sonrieron desdeñosamente y se dijeron: ¿Qué clase de hombres son estos que se resisten voluntariamente a la Sirenas? Permanecieron, pues, calladas, y los dejaron ir en medio de un silencio que era el peor de los insultos.
___________________________________________________________________
José de la Colina
(Santander, 1934)
Las Sirenas
Otra versión de la Odisea cuenta que la tripulación se perdió porque Ulises había ordenado a sus compañeros que se taparan los oídos para no oír el pérfido si bien dulce canto de las sirenas, pero olvidó indicarles que cerraran los ojos, y como además las sirenas, de formas generosas, sabían danzar...
___________________________________________________________________
Bibliografia:
Franz Kafka (1983): Obras Completas. Editorial Teorema. Barcelona.
Meri Lao (1995): Las Sirenas, historia de un símbolo. Ediciones Era. Mèxico.
Benito Arias García (2004): Grandes minicuentos fantásticos. Alfaguara. Madrid.
Gracias A Irlanda...por su bello poema.
Excelentes relatos, ¿pero sabes? más me sorprendió estar leyendo un relato con fecha 5 de mayo hoy día 1: ahora blogger viaja en el tiempo.
ResponderBorrarSaludos sangrientos
Blood
En definitiva, con las mujeres, sean ellas sirenas o no, terminamos generalmente perdiendo.
ResponderBorrar¿Alguien contó alguna vez la versión de las sirenas, después? ¿Y la de Penélope, siempre esperando la vuelta de Ulises?
ResponderBorrarMe gusta mucho tu blog, un gusto descubrirlo.
Salud.
no te puedo creer!!!!!!
ResponderBorrarsincronicidades...esta semana llevé El silencio de las sirenas para leer con mis alumnos
y bue, coincido con nandara...la versión de penélope urge ser escrita!
Gracias por pasar por Ambrosía y gracias por tu blog que me gustó mucho.
ResponderBorrarun abrazo
El silencio es tremendo ,muchos hablan de la soledad ,tengo suerte de que aún no he probado más que la soledad buscada a ratitos,por momentos,pero el silencio me preocupa más y que alguien utilice su silencio para hacer daño es muy doloroso,es una forma de maltrato.
ResponderBorrarMe ha gustado tu rincón y sobre todo me ha gustado los escritos sobre las sirenas. Estoy de acuerdo con esteban, cuando una mujer ó sirena se lo propone, los hombres no tenéis nada que hacer.
ResponderBorrarUn besito muy cálido
Gracias por tu visita en mi orilla.
Gracias por pasarte y firmar mi blog! :)
ResponderBorrarme gusta el tuyo! Muchas letras, mucha literaturaaa :D Qué lindo!
Saludos!!
¡¡Saludos, muchas gracias por visitarme, me alegro te haya gustado el post de los grafittis. Tienes un blog muy interesante, de verlo con tranquilidad, estaremos por aquí, te añadiré, ok, chao!!
ResponderBorrarDe Kafka recuerdo haber leído, con una expresión rara en el rostro, "El proceso", llegando a sentirme en ciertos momentos como Josef K. Aún así -y aunque aún no lo he comentado en el blog- me pareció muy buena obra.
ResponderBorrarPor cierto: menudo regalo el de Dylan. Ya quisiera yo tenerlo original, pero son treinta eurazos...
Gracias por este obsequio literario.
ResponderBorrarSaludos
me paso lo mismo que a "blood"... me asombro el ver la fecha.
ResponderBorrarrecuerdo haber leido a Kafka cuando era ni siquiera quinceañera, pero no fue el famoso Meta, sino otra novelita traducida por mi otro escritor favorito, don Manuel Rojas.
gracias por pasar por mi log, es cierto, de solo pensar que ya esta por cumplir 3 años me da ataque de caspa,
un abrazo,
una chilena en USA
Hola amigo, como siempre excelente pos, muy buenos relatos, lamentablemente hoy por hoy no tengo cabeza para ser aporte, hoy una gran pena me embarga, la perdí, perdí a mi amiga del alma, mi compañera de juerga, mi cómplice intelectual, mi confidente, hoy le quiero hacer un homenaje, si quieres únete, estas invitado, si así es te espero en dereyamendigo.blogspot.com
ResponderBorrarUn abrazo…
La reimaginación ha estado presente en la vida literaria de la humanidad desde el principio y Kafka me ha arrancado una sonrisa al descubrirlo aquí en tu blog. Ulises no se encadenó para escapar de las sirenas, sino de él mismo y, de ser cierto lo que afirman Esteban y la Cálida Sirena, pues dulce derrota la de nosotros los hombres...
ResponderBorrarToda mujer lleva dentro una sirena, pero muchas la esconden hasta la muerte. Y todo hombre se enfrenta tarde o temprano a su propia sirena. Lo difícil es encontrarla...
Abrazos Centrífugos!
Gracias por tu visita.
ResponderBorrarVoy a dormir pensando en mares llenos de sirenas :)
saludos!
Bonitas historias, todo un lujo leerlas. Gracias por tu visita y tu comentario en mi blog :-)
ResponderBorrarUn lametón de pantera.
Yo como Ulises, para guardarme del bello canto de las sirenas,me tapo los oídos con cera y me ato las manos para no destrozar con mis manos esa inocente alegría que poseen.
ResponderBorrarQue afortunado soy porque el sendero de la vida me ha traido hasta este lugar.
Gracias por el comentario, ahora me dispongo a navegar por las aguas dulces de tu blog.
Saludos desde el país de las tunas.
Si las razones de Ulysses para taparse los oídos y atarse al mástil era no sucumbir a los cantos de sirena es porque, como todos sabemos, es difícil resistir las tentaciones. Pero yo lo tengo claro: prefiero el canto al silencio.
ResponderBorrarGracias por visitar mi blog y hasta la próxima.
Querido Ulysses, me gusta tu blog, ásí que... volveré.
ResponderBorrarUn beso muy grande.
me encanta este relato, lo publiqué en mi blog hace tiempo.
ResponderBorrarKafka es un crack, uno de los grandes sin ninguna duda.
Saludos.
muy buen post, es hermoso ese relato de Kafka en especial, con ese título...
ResponderBorrary gracias por pasarte...
saludos!
"lxs carcelerxs están en todos lados, como los sueños de libertad"
Besos? le conozco de algo?
ResponderBorrarah ya entendi xD, soy algo cortita! gracias por pasarte por mi blog! aver si mejoro jejeje
ResponderBorrarasi que ulises no se encanto con el canto de las sirenas?
ResponderBorrarpor muy hombre que sea y desafie a los dioses no lo creo, podria haber otra version, pero de ser asi, se cambiaria la historia, aunque podria haber una estadia paralela pero que luego lo haga volver, crei que se habia escrito eso, sino me equivoco
gracias por pasar
una pausa y ya volvemos
Me encantó el relato de las sirenas, toda mujer llevamos una dentro, y lo peor que podemos soportar, es que no se nos escuche.
ResponderBorrarMe pasó lo mismo que a Blood.
ResponderBorrar¿De qué se trata esto de cambiar las fechas?
Genial Ulises (me refiero al héroe). Es más inteligente que todos los que inventan aventuras suyas.
Muy entretenidos los relatos.
Cariños.
Ulysses, te devuelvo la visita. Me gustó encontrar al judío checo, flaco y tuberculoso, encabezando tu blog. En una época, entre mis 13 y mis 16, sus escritos fueron un hermoso misterio para mi. Sobre todo los incompletos, los fragmentos, las voces desperdigadas por sus diarios y cuadernos.
ResponderBorrarJaque mate me has dejao y es que el relato no tiene desperdicio.
ResponderBorrarPues no he aprendio y to...
Jajaja
Lo he disfrutado mucho, mucho.
Por cierto, hasta me siento mejor, al menos mate a uno, con mi silencio digo y no me había dado cuenta. El capullo aquel
Y no soy sirena
Geniales relatos^^
ResponderBorrarPor cierto, ¿nos conocemos?
De Ulises y sus sirenas sé poco y nada ... definitivamente soy un iletrado.
ResponderBorrarVengo principalmente a dejarte mis mas sinceros agradecimientos por tu valioso apoyo a mi causa.
Un abrazo fraterno y que Dios te bendiga,
Alejandro
Con todo cariño te he dejado un regalo en mi blog.
ResponderBorrarGracias por siempre estar.
No hay peor castigo que la indiferencia, Ulises no contó con ello.
ResponderBorrarGracias por tu visita.
mi canto de sirena no es pérfido... ni lleva a los marineros a encallar... más bien todo lo contrario
ResponderBorrarbicos,
Aldabra
po si q eran poderosos el canto de la sirena
ResponderBorrarHola Ulysses, qué buen post. La mención de Kafka me trajo recuerdos de juventud.
ResponderBorrarTe ha quedado muy buena la remodelación de tu blog. Tengo algún problema con el feed de tu sitio, pero supongo será por los cambios.
Un beso, amigo.
MIl gracias por pasar por mi espacio y dejar tu saludo.
ResponderBorrarTu entrada sobre las sirenas...yo fuí sirena una vez para un Odiseo y como ellas callé, me perdí en su mirada y él se perdió en la mia, pero como Odiseo, él también regresó a Itaca.
saludos y un placer descubrir tu espacio
"no oyó el silencio"...me gusto esa fracesita y me recuerda una estrofa de una canción de cafe tacuba: "guardo dos compases de respiro, guardo dos compases de alivio,guardo dos compases de silencio..." el silencio es lindo jeje.
ResponderBorrarPor qué es cruel Carinyú? porque sabe de su poder, y lo aprovecha a su arbitrio. Por éso es cruel.
ResponderBorrarAcabo de subir a mi blog unos viejos pensamientos escritos donde Ulises está presente... si t da ganas leélo. bye!
marcela (maanavar)
le felicito por su blogg, me siento identificado con muchos de sus favoritos literarios... Un saludo... pau Llanes
ResponderBorrarsi de nombres se trata... xq no de seudónimos? el último cuento q presenté hace poquito en un concurso llevó como seudónimo "Odiseo".
ResponderBorrartal vez seas mujer (sería divertido) y cual sendas mascarones de proa eternamente desafiantes a los embates de piélagos continuaremos nuestra tarea... hasta pronto
Gracias! Le he echado una ojeada a tu blog y pones cosas muy interesantes. Tengo una pregunta, como hiciste para que el contenido de tu blog se vea más ensanchado? lo digo porque en el mío, como habrás podido ver, los márgenes donde empiezan las letras o las imágenes están a unos centímetros de los extremos de la pantalla.
ResponderBorrarUn saludo y gracias!
Hola! Gracias por tu comentario en mi blog! Un beso de colores! Cris
ResponderBorrarHola! Gracias por tu comentario en mi blog! Un beso de colores! Cris
ResponderBorrarExcelentes textos, tienes una gran capacidad de analisis, ya estas en mis favoritos, con gusto andare por aquí de vez en vez...
ResponderBorrarsaludos y gracias por la visita a mi blog, espero tenerte seguido por ahí..
un abrazo
Hola!!!!!!!!!!!!!!
ResponderBorrarGracias por pasarte por mi blogg, no se como hayas dado con el, pero como sea no importa, lo importante es que llegaste.
Saludos!
Ana.
Hay que dejarse arrastrar por el canto de las sirenas a menudo, porque si tapas tus oídos, ¿qué contarás a la vuelta del viaje?. Un saludo.
ResponderBorrarGracias por tu comentario en Mi universo personal. ¡Qué espacio tan interesante el tuyo!¡Voy a hacer un tour completo por aquí!¿Ya estás inscrito en REMES?(Red mundial de escritores en español)La dirección es:www.redescritoresespa.com.
ResponderBorrarSaludos.
Regresando la visita.
ResponderBorrarSobre el Circo del Absurdo: están usted y su blog aceptados; nada más necesito una dirección de correo electrónico y hago el aviso.
¡Saludos!
Me ha gustado mucho los temas de tu blogg,y aunque no lo creas has elegido autores y obras que son de mi agrado.
ResponderBorrarte invito a ver mi blogg nuevamente dado que he puesto el tuyo en links, porque tiene muy buenas notas y en dentro de un mes verás una publicación con un tema que tú ya has tratado , ´pero desde otro enfoque, es una sorpresa!
Recbí un saludo.
maría del carmen
Hermoso relato y hermoso tu blogger....Felicitaciones!!
ResponderBorrarUn gusto de leer. Que orgullosas las sirenas!
ResponderBorrarsaludos,
te cojo la frase de Borges para ponerla en mi blog :P
ResponderBorrarMe encantan las sirenas, seguro que yo me hubiera quedado extasiada viéndolas...
ResponderBorrarMás besotessssssssss