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3 de octubre de 2007

Rubén Darío- A Margarita Debayle (1908)


Rubén Darío

El Doctor Luis Henry Debayle Pallais, fue un gran amigo del poeta Nicaragüense Rubén Darío, éste le dedicaría el famoso poema a Margarita Debayle, a una de sus hijas.
Este fue uno de los primeros poemas que aprendí de memoria en mi infancia


A Margarita Debayle

Margarita está linda la mar,
y el viento,
lleva esencia sutil de azahar;
yo siento
en el alma una alondra cantar;
tu acento:
Margarita, te voy a contar
un cuento:

Esto era un rey que tenía
un palacio de diamantes,
una tienda hecha de día
y un rebaño de elefantes,
un kiosko de malaquita,
un gran manto de tisú,
y una gentil princesita,
tan bonita,
Margarita,
tan bonita, como tú.

Una tarde, la princesa
vio una estrella aparecer;
la princesa era traviesa
y la quiso ir a coger.

La quería para hacerla
decorar un prendedor,
con un verso y una perla
y una pluma y una flor.

Las princesas primorosas
se parecen mucho a ti:
cortan lirios, cortan rosas,
cortan astros. Son así.

Pues se fue la niña bella,
bajo el cielo y sobre el mar,
a cortar la blanca estrella
que la hacía suspirar.

Y siguió camino arriba,
por la luna y más allá;
más lo malo es que ella iba
sin permiso de papá.

Cuando estuvo ya de vuelta
de los parques del Señor,
se miraba toda envuelta
en un dulce resplandor.

Y el rey dijo: «¿Qué te has hecho?
te he buscado y no te hallé;
y ¿qué tienes en el pecho
que encendido se te ve?».

La princesa no mentía.
Y así, dijo la verdad:
«Fui a cortar la estrella mía
a la azul inmensidad».

Y el rey clama: «¿No te he dicho
que el azul no hay que cortar?.
¡Qué locura!, ¡Qué capricho!...
El Señor se va a enojar».

Y ella dice: «No hubo intento;
yo me fui no sé por qué.
Por las olas por el viento
fui a la estrella y la corté».

Y el papá dice enojado:
«Un castigo has de tener:
vuelve al cielo y lo robado
vas ahora a devolver».

La princesa se entristece
por su dulce flor de luz,
cuando entonces aparece
sonriendo el Buen Jesús.

Y así dice: «En mis campiñas
esa rosa le ofrecí;
son mis flores de las niñas
que al soñar piensan en mí».

Viste el rey pompas brillantes,
y luego hace desfilar
cuatrocientos elefantes
a la orilla de la mar.

La princesita está bella,
pues ya tiene el prendedor
en que lucen, con la estrella,
verso, perla, pluma y flor.

* * *

Margarita, está linda la mar,
y el viento
lleva esencia sutil de azahar:
tu aliento.

Ya que lejos de mí vas a estar,
guarda, niña, un gentil pensamiento
al que un día te quiso contar
un cuento.

12 comentarios:

  1. que mejor poema para quedarse prendado de la poesia las letras la rima y la prosa?

    me encanto gracias por compartirlo

    un beso

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  2. Unos versos muy lindos, que me han dado ilusiones en este día lluvioso.

    Gracias por publicarlo y compartirlo.

    Sé feliz, aquí y ahora,



    Rafael Hernampérez

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  3. Creo que debería ser de obligado cumplimiento el que todos los días nos tomáramos un instante para leer un poema, observar una puesta de sol, o en definitiva, buscar la belleza .. es la única protesta que merece la pena en este mundo.

    Saludos

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  4. Precioso poema mi querido Ulysses.

    También yo lo recuerdo de mi infancia...

    Gracias!

    Muchos besitos.

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  5. Ulyses: Gracias por tu visita a mi casa y tus palabras por mi relato.
    El poema de Darío me ha acompañado durante toda mi vida, que es larga. Lamentablemente, los poetas modernos (algunos) y críticos desmerecen este tipo de poesía argumentando que esos códigos están pasados de moda. Yo no lo creo. No es fácil cultivar la rima con elegancia y acomodar a ésta el ritmo y la cadencia.
    Mi hija, cuando niña, vió una líbélula entrar por la ventana y, como era muy chica para recordar el nombre, me dijo: -"Mira, mami, 'una vaga ilusión'". Nunca he olvidado ese momento. Gracias por traernos a Darío hasta el presente. Te seguiré leyendo despacio. Un fuerte abrazo.

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  6. Pienso que cuando eramos niños y empezamos a estudiar algo de poesía este era nuestro primer poema obligado para aprender.

    Gracias por compartirlo

    Besos

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  7. Muy bonito el poema, la rima y la prosa. ¡Gracias por traer a la memoria los hermosos poemas de Rubén Darío.
    Un cálido abrazo...

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  8. Es precioso el poema, y te recuerda que esta vida tambien esta llena de belleza y ternura. Muchas gracias por recordarnoslo. Saludos

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  9. que hermoso es tener princesitas cerca, solo las palabras del poeta son justa retribucion a su existencia.
    Gracias por llegar a mi blog, fuiste el primer visitante, me gustaria enviarte algo, ojala puedas enviar alguna direccion postal.
    Afectuosos saludos.

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  10. Ahora soy yo quien visita su página y me encuentro con la sorpresa del poema de Rubén y yo soy admiradora de Mistral y Neruda. Le felicito, un página muy buena, informativa con un gran enfoque cultural. Saludes

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  11. Hola, un cantante nicaragüense le puso música a este poema- y a otros de Darío- y realizó un vídeo en la Isla del Cardón y quedó bellísimo. Ojalá algún día yo pudiese poner algo del mismo en mi blog.

    Gracias por traer a Rubén.

    Saludos♥

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  12. He llegado hasta acá por el recién creado blog de un tal "Lord", y me ha encantado encontrar este poema. Me lo recitaba mi abuelo haciéndome creer que yo era la princesa. Seguiré visitándote.

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