Isadora Duncan
Dora Angela Duncan, conocida como Isadora Duncan (San Francisco, 27 de mayo de 1878 - Niza, 14 de septiembre de 1927)
Fue una bailarina estadounidense.
En los últimos años de su vida gustaba de los hombres más jóvenes que ella.
Un día un muchacho pasó a recogerla a su casa llevándole un Bugatti de reciente modelo para mostrárselo. Realmente a Isadora le interesaba el joven, y el auto fue el pretexto, pues este joven trabajaba para una distribuidora de autos.
Ella salió a recibirlo y subió al auto, que era de esos que tenían las llantas no al ras de la carrocería, sino un poco hacia afuera, y las ruedas traseras quedaban muy cerca de la cabina de manejo (creo que el auto era de dos plazas, o sea, dos asientos solamente).
La asistente de Isadora le dijo que se llevara un abrigo porque estaba fresco el clima, pero ella no hizo caso, sólo llevaba un chal.
Al subir al auto se enrolló el chal al cuello, sin notar que una punta quedó muy cerca de la llanta trasera (la que estaba de su lado). Al arrancar el auto el chal se atascó en la rueda, la cabeza de Isadora sufrió un tremendo jalón hacia atrás y la bailarina se desnucó. Murió al instante.
Fue una bailarina estadounidense.
En los últimos años de su vida gustaba de los hombres más jóvenes que ella.
Un día un muchacho pasó a recogerla a su casa llevándole un Bugatti de reciente modelo para mostrárselo. Realmente a Isadora le interesaba el joven, y el auto fue el pretexto, pues este joven trabajaba para una distribuidora de autos.
Ella salió a recibirlo y subió al auto, que era de esos que tenían las llantas no al ras de la carrocería, sino un poco hacia afuera, y las ruedas traseras quedaban muy cerca de la cabina de manejo (creo que el auto era de dos plazas, o sea, dos asientos solamente).
La asistente de Isadora le dijo que se llevara un abrigo porque estaba fresco el clima, pero ella no hizo caso, sólo llevaba un chal.
Al subir al auto se enrolló el chal al cuello, sin notar que una punta quedó muy cerca de la llanta trasera (la que estaba de su lado). Al arrancar el auto el chal se atascó en la rueda, la cabeza de Isadora sufrió un tremendo jalón hacia atrás y la bailarina se desnucó. Murió al instante.
que horrible muerte!!!
ResponderBorrary que inespereada
hace un tiempo ví una película en que la protagonísta tenía similar fín
y es perturbadora esa imagen:)
un abracito
Es curioso, pero esta anécdota me trae gratos recuedos de mi adolescencia, cuando hacía ballet y nuestro profesor nos contó la anécdota como algo casi bello y sublime. hoy lo veo como algo triste, pobre mujer.
ResponderBorrarLa Duncan fué algo muy impoortante en la danza,en su evolución a algo mas allá de lo encorsetado del clásico y aunque hubiera muerto de vieja hoy sería una leyenda, pero esa muerte tan peculiar y romántica afianzó aún más el mito.
Gracias por traerme a la memoria aquellos tiempos
Que feo final de isadora, bueno una esta acostumbrada a que todos terminen felices comiendo perdices.
ResponderBorrarPero igual me entretuviste mucho.
Juro no usar mas chal rojo, jajaaj
cariños
He leído el libro de su vida y era espectacular muy independiente, siempre se estaba renovando aunque a veces era indecisa.
ResponderBorrarLlego a obtener mucho dinero y tan pronto lo perdía en escuelas de baile para gente de inferioridad económica y siempre salia perdiendo, puesto que siempre lo manejaban otras personas que lo distribuían a su antojo.
Lo que fue muy triste y desagradable el accidente que le costo la vida cuando aun estaba remontando de nuevo.
De echo hizo historia, y es casi una obligación leerla, para tomar contacto con un arte nuevo en ese momento, una forma diferente de expresión corporal.
Un abrazo y hasta otro momento, te deseo que disfrutes de una feliz semana llena de armonía.
♥
ResponderBorrarQué final tan terrible. Gracias por el dato.
Salud♥s
Isadora se hizo desde la nada, tuvo una infancia muy desdichada, luego la vida la bofeteó en mas de una ocasión. La muerte de sus hijos, tremendamente cruel.
ResponderBorrarUna gran innovadora en su arte, luego muchos copiaron su danza descalza...
Me gustó mucho tu publicación.
Un beso Ulysses
Ví hace muchos años la película que se hizo sobre ella y esa escena es impresionante.La actriz que hacía de ella es de las mejores (Vanessa Redgrave).Saludos
ResponderBorrarVaya, no lo sabía... fuerte e inesperado.
ResponderBorrarSaludos Ulysses
Que triste final para tan bella bailarina, su ultima danza fue con la muerte.....Besos, cuidate.
ResponderBorrarSabía de la muerte de dicha SEÑORA.Pero creía que fué en un carruaje.El caso es que me dejó marcada desde que supe de ello.Desde entonces no uso pañuelos al cuello.En serio.Un placer venir por aquí...
ResponderBorrarque historia triste, que muerte inesperada, pero el destino es asi, besitos y gracias por tu comentario en mi blog.
ResponderBorrarpues no conocía esta historia, nunca supe como había muerto Isadora, pobre.
ResponderBorrarmuy triste final.
bicos,
Todavía recuerdo lo que me impresionó verla reflejada en pantalla, en una espléndida escena, en la película "Isadora Duncan" protagonizada, si no recuerdo mal, por Vanessa Redgrave, estupenda actriz por otro lado.
ResponderBorrarBicos.
Una muerte tan lejana en el tiempo y tan insólita en su forma, tiene el plus no obstante el marco de fatalidad e infortunio que la rodeó, que tras tantos años recordemos a Isadora por su ejemplo artístico, que supera las distintas épocas y acerca generaciones.
ResponderBorrarVale la pena la añoranza estimado Ulysses.
Saludos.
Desde mi blog: Reflexiones al desnudo
ResponderBorrarTe cuento que volví a leer tu entrada porque me parecía como un cuento trágico, pero real! Ohh!! impactante.
Desconocía de esta bailarina y su final trágico.
Besitos para ti con especial afecto!
Ya conocía esa historia. Realmente fue un final muy trágico.
ResponderBorrarBesos felinos.
delavidayotrosviajes.blogspot.com
madre mía... qué terrorífica casualidad
ResponderBorrarMe vas a creer que antes de leer, con sólo mirar la imagen primero se me vino a la mente Isidora Duncan sin saber que era ella... inexplicable.
ResponderBorrarSu muerte fue horrorosa, trágica, un gran talento que desaparece en forma tan repentina.
Un abrazo y muchos cariños.