Adam Zagajewski es un poeta de la claridad. En sus versos asoman inviernos infinitos, sabor de hojas, arboledas y sonidos, casas como un bolsillo en un abrigo, violonchelos, aeropuertos, los vivos y los muertos, un anhelo, la memoria y, a veces, el tiempo circular. Zagajewski es asimismo un poeta visual, de palabras que son celebración del mundo y sus imágenes. Es el canto de un instante que se expande, que involucra, y en el que converge la realidad toda, epifánica y plural, siempre presente. Poeta exiliado, la suya no es, sin embargo, una poesía del exilio. Se le considera una de las figuras más relevantes y con más repercusión internacional de la nueva generación de poetas polacos.
Distinguido con el Premio Europeo di Poesia 2010 por el conjunto de su obra.
Bajo otra luz ves de repente el mundo,
las puertas de casas ajenas se entreabrirán por
un momento,
los pensamientos secretos saldrán, serán las fiestas
menos dolorosas,
más comprensible la alegría ajena,
y más bellas las caras.
Olvídate de ti, ciégate de éxtasis,
olvídate de todo, volverá así quizás
una fraternidad y una memoria más profundas,
y dirás no lo sé, no sé cómo ocurrió:
las palmeras abrieron mi corazón ansioso.
Traducción: Xavier Farré
Tierra del fuego, Adam ZagajewskiEd. Acantilado
Impresionante!!!
ResponderBorrarDesconocía a este autor, gracias por traerlo
Saludos