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24 de octubre de 2012

Nicanor Parra Manifiesto





Manifiesto

Señoras y señores Esta es nuestra última palabra. -Nuestra primera y última palabra- Los poetas bajaron del Olimpo. Para nuestros mayores La poesía fue un objeto de lujo Pero para nosotros Es un artículo de primera necesidad: No podemos vivir sin poesía. A diferencia de nuestros mayores -Y esto lo digo con todo respeto- Nosotros sostenemos Que el poeta no es un alquimista El poeta es un hombre como todos Un albañil que construye su muro: Un constructor de puertas y ventanas. Nosotros conversamos En el lenguaje de todos los días No creemos en signos cabalísticos. Además una cosa: El poeta está ahí Para que el árbol no crezca torcido. Este es nuestro lenguaje. Nosotros denunciamos al poeta demiurgo Al poeta Barata Al poeta Ratón de Biblioteca. Todo estos señores -Y esto lo digo con mucho respeto- Deben ser procesados y juzgados Por construir castillos en el aire Por malgastar el espacio y el tiempo Redactando sonetos a la luna Por agrupar palabras al azar A la última moda de París. Para nosotros no: El pensamiento no nace en la boca Nace en el corazón del corazón. Nosotros repudiamos La poesía de gafas obscuras La poesía de capa y espada La poesía de sombrero alón. Propiciamos en cambio La poesía a ojo desnudo La poesía a pecho descubierto La poesía a cabeza desnuda. No creemos en ninfas ni tritones. La poesía tiene que ser esto: Una muchacha rodeada de espigas O no ser absolutamente nada. Ahora bien, en el plano político Ellos, nuestros abuelos inmediatos, ¡Nuestros buenos abuelos inmediatos! Se refractaron y dispersaron Al pasar por el prisma de cristal. Unos pocos se hicieron comunistas. Yo no sé si lo fueron realmente. Supongamos que fueron comunistas, Lo que sé es una cosa: Que no fueron poetas populares, Fueron unos reverendos poetas burgueses. Hay que decir las cosas como son: Sólo uno que otro Supo llegar al corazón del pueblo. Cada vez que pudieron Se declararon de palabra y de hecho Contra la poesía dirigida Contra la poesía del presente Contra la poesía proletaria. Aceptemos que fueron comunistas Pero la poesía fue un desastre Surrealismo de segunda mano Decadentismo de tercera mano, Tablas viejas devueltas por el mar. Poesía adjetiva Poesía nasal y gutural Poesía arbitraria Poesía copiada de los libros Poesía basada En la revolución de la palabra En circunstancias de que debe fundarse En la revolución de las ideas. Poesía de círculo vicioso Para media docena de elegidos: "Libertad absoluta de expresión". Hoy nos hacemos cruces preguntando Para qué escribirían esas cosas ¿Para asustar al pequeño burgués? ¡Tiempo perdido miserablemente! El pequeño burgués no reacciona Sino cuando se trata del estómago. ¡Qué lo van a asustar con poesías! La situación es ésta: Mientras ellos estaban Por una poesía del crepúsculo Por una poesía de la noche Nosotros propugnamos La poesía del amanecer. Este es nuestro mensaje, Los resplandores de la poesía Deben llegar a todos por igual La poesía alcanza para todos. Nada más, compañeros Nosotros condenamos -Y esto sí que lo digo con respeto- La poesía de pequeño dios La poesía de vaca sagrada La poesía de toro furioso. Contra la poesía de las nubes Nosotros oponemos La poesía de la tierra firma -Cabeza fría, corazón caliente Somos tierrafirmistas decididos- Contra la poesía de café La poesía de la naturaleza Contra la poesía de salón La poesía de la plaza pública La poesía de protesta social. Los poetas bajaron del Olimpo.

27 de junio de 2012

El hombre imaginario Nicanor Parra

El hombre imaginario

El hombre imaginario 
 vive en una mansión imaginaria
rodeada de árboles imaginarios
 a la orilla de un río imaginario

 De los muros que son imaginarios
 penden antiguos cuadros imaginarios
 irreparables grietas imaginarias
 que representan hechos imaginarios
 ocurridos en mundos imaginarios 
 en lugares y tiempos imaginarios

 Todas las tardes tardes imaginarias 
 sube las escaleras imaginarias
 y se asoma al balcón imaginario 
 a mirar el paisaje imaginario 
 que consiste en un valle imaginario
 circundado de cerros imaginarios

 Sombras imaginarias
 vienen por el camino imaginario
 entonando canciones imaginarias
 a la muerte del sol imaginario

 Y en las noches de luna imaginaria
sueña con la mujer imaginaria 
 que le brindó su amor imaginario 
 vuelve a sentir ese mismo dolor 
 ese mismo placer imaginario
 y vuelve a palpitar
 el corazón del hombre imaginario


 de Hojas de parra (Santiago, Ganímedes, 1985)

3 de octubre de 2011

Nicanor Parra -Ecopoemas

Nicanor Parra


El error consistió
en creer que la tierra era nuestra
cuando la verdad de las cosas
es que nosotros somos de la tierra

30 de agosto de 2009

Jaquemate o como jugar contra la muerte


Mural del pintor medieval de iglesias Albertus Pictor


Antonius Block, un caballero cruzado, regresa con su escudero a su tierra natal de Suecia después de 10 años de ausencia en las Cruzadas. Se encuentra con una comarca diezmada por la peste. La figura de la Muerte aparece para reclamar a los habitantes de su pueblo y éste decide retar a la Muerte a un juego de ajedrez y con ello ganar tiempo para así encontrar un acto cuya ejecución le dé sentido a su vida antes de morir. (Esta escena está inspirada en un mural del pintor medieval de iglesias Albertus Pictor ("Albert Målare"), quien también aparece como personaje en la película.)

En el final de la Edad Media o Alta Edad Media. Vemos al hombre que pierde la fe. A otro que no cree (nacimiento del hombre burgués) y el concepto iconográfico que se queda grabado en el hombre contemporáneo de la "Danza Macabra". El eterno discurso sobre el hombre y la muerte



- Usted no puede ganar.
- Tampoco puede empatar.
- Ni siquiera puede abandonar el juego.


Nicanor Parra



Por lo menos una semana, estaré ausente

22 de junio de 2009

NICANOR PARRA ¿UNO MAS EN LA GUERRILLA?

Artefactos de Nicanor Parra






Las luchas tan características de la poesía chilena no desaparecieron con las muertes de Vicente Huidobro y Pablo de Rokha.

EL CUARTO CONTRINCANTE


Quizás no sea exagerado considerar al "antipoeta", Nicanor Parra, como el cuarto contrincante de la guerrilla literaria; y también, de alguna manera, el último: el culto de la personalidad que rodeaba a esos "tres egos monumentales" parecería haber pasado de moda en nuestra época de la comunicación masiva, y la antipoesía parecería haberse encargado de la degradación definitiva del poeta como un "antihéroe"’.
En vez de discutir los respectivos méritos de los tres mayores, Parra veía sus coincidencias en su fe común en el poder especial, casi divino, del poeta. Para el antipoeta los poetas bajaron del Olimpo:
Nosotros condenamos:
-Y esto sí que lo digo con respeto
La poesía de pequeño dios
La poesía de vaca sagrada
La poesía de toro furioso.

REFERENCIA CLARA

La referencia es clarísima en este poema, "Manifiesto", de 1963: el pequeño dios es Huidobro, la vaca sagrada Neruda, y el toro furioso Pablo de Rokha. Huidobro, por supuesto, ya estaba muerto desde hacía quince años, y tal vez De Rokha imaginó, al comienzo, que le quedaba un duelo solitario con Neruda: tal se entiende, al menos, por las ciento y tantas páginas de invectiva e hipérbole que invirtió en "Neruda y yo", publicado en 1955. Por lo tanto, la aparición -y el reconocimiento instantáneo- de “Poemas y antipoemas” y posteriormente el rechazo a su obra como “poesía de toro furioso”, lograron incitar, una vez más, la furia derokhiana. Parra era: “un mistificador idiota, absolutamente idiota y perverso, nada más que ‘un pingajo del zapato de Vallejo’, y cuyos antipoemas "inspiran lástima y asco".
Sin embargo, no cabe duda que la estrella titubeante de Pablo de Rokha no era el blanco principal del prefijo "anti"”, con el cual se había bautizado y consagrado Parra. El antipoeta se elevó en oposición, al comienzo silenciosa pero paulatinamente más explícita, al Poeta por excelencia, reconocido no sólo en Chile sino en gran parte del mundo: Neruda.

LIBRARSE DEL PADRE

Según Mario Benedetti, en una entrevista con Parra de 1969, la antipoesía es más bien una poesía antineruda, que rechaza las formas del poeta mayor. Parra reconoció cierta verdad en esto: “para ser sincero, Neruda fue siempre un problema para mí; un desafío, un obstáculo que se ponía en el camino; entonces había que pensar las cosas en términos de este monstruo. De modo que, en ese sentido, la palabra Neruda está allí como un marco de referencia” O, como dice -en otra entrevista- del mismo año: "sufrí el complejo del padre con respecto a él. Traté de zafarme desde que tuve uso de razón. Era el padre que aparecía ante el hijo como demasiado poderoso. A lo mejor sigo sufriendo."

Lo cierto es que la antipoesía tal como la reconocemos, jamás habría existido sin el apoyo y la amistad de Neruda. Por un lado, los manuscritos de "Poemas y antipoemas" se habrían perdido sin la ayuda de Neruda. Llegando un día a Isla Negra, Parra se dió cuenta que no tenía la maleta con los manuscritos:

“Se me había quedado en un restaurante de Melipilla, donde habíamos pasado a hacer un aro. Yo estaba desesperado y le dije a Pablo que iría a buscar la maleta, pero me dijo que ya no la recuperaría jamás, que él se hacía cargo. Le pidió a un chofer de micro que la buscara, haciendo pesar su influencia de poeta conocido, de senador y de "compañero". Después de unas horas entró en el living y dijo "Acto de magia", y de debajo de una manta que le colgaba de una mano, sacó la maleta. Yo no lo podía creer”.

En otra visita a Isla Negra, Parra leyó por primera vez los antipoemas, provocando "más hilaridad que simpatía" entre los demás invitados. La reacción de Neruda, sin embargo, era mucho más positiva: “se paseaba de un lado a otro como un oso enjaulado, se rascaba la nariz, me miraba y me preguntaba que cómo había hecho eso, escribir poesía de la nada. Al final me dijo: "si tu haces lo mismo a lo largo de todo un libro, entonces va a ocurrir algo".

AMISTAD EN CRISIS

Otro acto importantísimo de apoyo fue el elogio que escribió Neruda para la solapa de la primera edición de "Poemas y antipoemas", donde afirma que la poesía de Parra es "una delicia de oro matutino o un fruto consumado en las tinieblas”, que se destaca “por su follaje singular y sus fuertes raíces", y que puede “redondear como una vasija el canto con las sutiles líneas de la gracia”.
La verdad es que esta presentación parecería corresponder más a la poesía nerudiana que a Parra. El "discípulo" -como el poeta menor, que de algún modo, había llegado a ser- difería profundamente de su maestro, y el éxito de "Poemas y Antipoemas" le permitió librarse del tutelaje de Neruda y perseguir sus propios rumbos. Alrededor suyo, además, empezaba a formarse un grupo de escritores jóvenes que discrepaban con la poesía nerudiana de la época: Enrique Lihn, Jorge Teillier, Enrique Lafourcade, Alejandro Jodorowsky, entre otros. A partir de 1954, las relaciones personales entre Neruda y Parra se enfriaron o, mejor dicho, llegaron a constituir una extraña mezcla de recelo y de afecto, cuya manifestación más nítida ocurriría en 1962.
En marzo de ese año, la Facultad de Filosofía y Educación de la Universidad de Chile recibió a Pablo Neruda en calidad de Miembro Académico, en reconocimiento a su poesía. Nicanor Parra, profesor en la Universidad, tuvo a su cargo el discurso de recepción, que después se publicó junto a la intervención de Neruda.
El discurso es característicamente ambiguo, y aunque Parra profesa dirigirse a su amigo y maestro, surge la impresión de que la amistad entre los dos poetas está en crisis, y que el discípulo rechaza las últimas obras de su ex-maestro.
La obra de Neruda, sostiene Parra en su discurso, es un “proceso permanente de expansión y desarrollo” . Empleando un lenguaje burlonamente pseudo-intelectual, Parra delínea tres etapas en la trayectoria nerudiana: la primera va de Crepusculario a El Hondero Entusiasta, la segunda incorpora las dos primeras Residencias, y la tercera culmina con Canto General y Odas Elementales. Usando la base de esta división, Parra ofrece una serie de elogios de Neruda en tres distintos planos: el personal, el político y el poético. Sin embargo, en forma semi-oculta manifiesta sus críticas al Neruda de 1962 en los mismos tres planos.

LOS ELOGIOS A NERUDA COMO PERSONA, POLÍTICO Y POETA

La mejor de las etapas de Neruda, insiste Parra, es la tercera, “la etapa de la curación por el método marxista” en la cual los “falsos problemas individuales” se superan. “De todo lo cual pareciera surgir la enseñanza de que la plenitud del individuo es la resultante natural de su integración correcta a la lucha social”. Efectivamente, el Neruda exiliado por González Videla era un héroe, y Parra recita un poema que él mismo había escrito en honor de ese senador exiliado, a su vuelta a Chile en 1952.
Según Parra, él y Neruda representan dos formas de combate, ambas en servicio de la misma causa. El es un antipoeta, un "francotirador", que debate "a papirotazos", mientras que Neruda es un "poeta soldado", que “no da un paso sin su ametralladora personal”. Ambos poetas repudian el estado actual de la sociedad, puesto que “fuera de la lucha social todo es dolor, todo es tiniebla; todos los caminos conducen a la locura”.
Parra recita “El hombre invisible, poema inaugural de "Odas Elementales", donde “se ve centrada en una sola imagen la esencia del conflicto nerudiano, que no es otro que el conflicto central del hombre moderno, el paso del yo al nosotros. El antipoeta también se perfila como un hombre del montón, que habla el lenguaje de todos los días, así logrando su propio paso "del yo al nosotros". En vista de este acercamiento entre la poesía de Parra y de "Odas Elementales", habría que resaltar la última oración del discurso, donde Parra afirma que "las flechas inflamadas que él arroja al espacio se incrustan en la frente y en el corazón del lector por muy gruesa que sea la capa de plomo que los cubra". Esta descripción del efecto de la poesía comprometida de Neruda, se acerca a la que hace Parra de la misma antipoesía, que procura, en el poema “Advertencia al lector”, enterrar sus plumas “en la cabeza de los señores lectores”.

LAS CRÍTICAS A NERUDA

A pesar de los elogios que hace Nicanor Parra a "Canto General" y a "Odas Elementales", hay una serie de críticas implícitas y semi-ocultas que se desprenden del discurso, dirigidas tanto al comportamiento personal y político de Neruda como a su poesía.
En el plano personal, Parra afirma que Neruda se ha alejado de la gente común y se ha encerrado, por lo visto, en una especie de torre de marfil. "Hace tanto tanto tiempo que no converso con mi amigo Pablo, con mi hermano mayor, con mi maestro "al Pablo Neruda 1962 no le he visto ni la luz". ¡Neruda se ha vuelto inaccesible! "Su persona ha desaparecido de la circulación. Las escasas noticias que podemos obtener de él nos llegan refractadas y enrarecidas a través de los prismas intermediarios". Recordemos que la primera versión del poema paradigmático, "El hombre invisible", se llamaba "Hablando en la calle". Al parecer, el Pablo Neruda de 1962 había dejado de salir y hablar en la calle. La mención de los prismas intermediarios podría referirse al aparato partidario. Años después Parra hablaría de esto: "Yo sentía mucho no poder sentarme con Neruda, así como hermano, como amigo, tranquilamente a conversar. Eso no era posible porque estaban en el planteamiento de las relaciones verticales del socialismo autoritario".

LA CRÍTICA POLÍTICA

En cuanto a la política, hay la insinuación de cierta complacencia en el comportamiento de Neruda en los últimos años. El poeta ahora había "sorteado todos los peligros", y Parra observa "con asombro creciente su desplazamiento anual a lo largo del zodiaco" -con la sugerencia de que el `trotamundos’ haya perdido su preocupación por la situación política de Chile. Además Parra califica "Oda al caldillo de congrio" como "poesía para después de la revolución”, y considera que “el poeta ha resuelto todos sus problemas y se sienta sonriente a la mesa, a disfrutar del banquete marítimo y terrestre". Los problemas del poeta se habrían resuelto, pero es evidente que los problemas de la sociedad chilena seguían iguales: la revolución no había llegado ni a Chile ni a ningún país de Latinóamérica, y eran pocos quienes podían sentarse a disfrutar de un banquete. La crítica implícita en el discurso parecería preguntar: ¿cómo, entonces, celebrar una revolución que no ha ocurrido, sin que la sonrisa del celebrante sea complaciente?.

LA CRÍTICA POÉTICA

En términos literarios, el discurso da la impresión de que la poesía importante de Neruda ha llegado a su fin. En ningún momento se refiere Parra a la poesía posterior a Odas, la etapa que empieza con Estravagario en 1958 y corresponde a lo que se ha llamado una poesía "de la penumbra". Parra habla más bien de “la misión llevada a feliz término por Pablo Neruda a lo largo de cuarenta años de investigación espiritual”. Llama la atención esta palabra “término”. El poeta-héroe de 1952, a quien Parra dedicó su poema lleno de “devoción” y “afecto” parece haberse agotado en sus esfuerzos por escribir una poesía para todos. Si bien “El hombre invisible” se caracterizó por el paso del yo al nosotros, Neruda no siguió este camino , dando su espalda a la poesía de Odas en Estravagario, donde afirmó el derecho de escribir una poesía personal y privada:
“voy a abrirme y voy a encerrarme con mi más pérfido enemigo, Pablo Neruda.”
Sin embargo, hay otro motivo por el cual Parra habría ignorado esta última etapa de la poesía de Neruda. Si bien Estravagario puede verse como un regreso a temáticas olvidadas, también fue interpretado como una respuesta a la poesía de Parra mismo: “en el momento de su aparición, la crítica chilena insinuó -quizás para provocar una pequeña tormenta- que Estravagario estaba influido por la poesía más reciente de Nicanor Parra en especial por “La cueca larga” y “Discurso fúnebre”, conocidos desde mediados de los años cincuenta . Más tarde, el crítico René de Costa, cuyo libro sobre Neruda recién se ha publicado en castellano, se refiriría a Estravagario como “antipoesía”, resaltando la importancia de Parra en la nueva obra nerudiana:
“Estravagario es importante... por la exitosa adaptación del tono y el estilo de lo que hoy se llama antipoesía. Neruda utiliza en esta obra muchas de las técnicas y procedimientos de Poemas y antipoemas, de Parra ( 1954), comienza toda una nueva etapa de su propia poesía, y contribuye a la aceptación de un tipo de expresión literaria radicalmente diferente”.

Al ignorar Estravagario, parecería que Parra estaría afirmando su derecho a defender su propia poesía, que Neruda estaría "plagiando", como diría el lenguaje de la guerrilla literaria.

Durante su discurso, Parra declara que “la verdadera seriedad es cómica”, y recita un poema en el cual compara la seriedad de solterona, de juez de letras, de cura párroco, etc., con la “verdadera seriedad” de Kafka, Chaplín, Chejov, Cervantes y Quevedo. Dos veces repite los versos ultra-conocidos de Quevedo "Érase un hombre a una nariz pegado / Érase una nariz superlativa”-, que sirvieron como armas en la otra gran guerrilla de la literatura de lengua española, sostenida entre Quevedo y Góngora. Me pregunto si alguien en el público habría relacionado esa guerrilla española con la que existía en Chile, en la cual Parra ahora se estaría arrojando, y si ese alguien, al formular la relación, habría mirado, muy de reojo, el perfil definitivamente narigón de Neruda: "érase una nariz superlativa..."

EL NERUDA DE LA INSTITUCIÓN

Según el discurso de Parra, el héroe rebelde que había vivido en forma clandestina en Chile durante un año, y luego había pasado a un exilio de varios años, parece haber perdido su rebeldía y entrado en la institución.
Parra relaciona, en forma simbólica, “este acto de recepción a nuestro poeta máximo con el antiacto de desafuero de que fue víctima inocente el senador Pablo Neruda el año 1949”, y afirma que ahora "don Andrés Bello lo llama desde la eternidad de su columna de mármol y lo proclama su hijo predilecto". Así Pablo Neruda llega a ser considerado como si fuera un poeta del pasado, ya agotado, que acompañaría a don Andrés Bello entre los clásicos de la patria, un monumento institucionalizado para la posteridad entre las columnas de mármol de la institución universitaria, y recordemos que la finalidad última del antipoeta, como ya antes había dicho Parra, es “hacer saltar a papirotazos los cimientos apolillados de las instituciones caducas y anquilosadas”.

“MADRID ES EL CORAZÓN”

Una indicación final de esta visión de un Neruda ya terminado, es el texto que Parra recita en los últimos momentos de su discurso: “Spain”, uno de los poemas más conocidos del inglés W. H. Auden. La conexión con Neruda es evidente, sobre todo en el verso “Madrid en el corazón”, que hace recordar el libro que Neruda publicó durante la guerra civil, “España es el corazón”. Sin embargo hay una razón para cuestionar los motivos detrás de la elección de este poema. Poco después de escribir una primera versión de “Spain”, en 1937, Auden se alejó del Partido Comunista y cuando lo reescribió, en 1940, cortó todas las referencias de índole claramente comunista, tal como “la entusiasta elección de un comité / por un repentino bosque de manos elevadas”, y también quita el verso “Madrid es el corazón”. Llama la atención que Parra, conocedor de la poesía de Auden desde su estadía en Inglaterra a comienzos del año cincuenta, recita la primera versión del poema, es decir, la versión “comunista” que el propio poeta había rechazado. La elección de “Spain” podría sugerir, entonces, que la poesía comprometida de Pablo Neruda es, para Parra, una poesía del pasado, que ahora necesitaría reescribirse. En este caso, la poesía del “francotirador” resultaría ser el camino del futuro, una poesía que ataca las instituciones caducas -entre ellas Neruda- mediante la risa, y que al mismo tiempo insiste en la necesidad de un yo poético realmente colectivo.

Visto así, el discurso parecería
(a) celebrar la poesía comprometida de Neruda;
(b) ignorar -y, se supone, despreciar- la poesía posterior, "de la penumbra", por ser una mera copia de la antipoesía;
(c) opinar, además, que incluso la poesía de compromiso de Neruda ya era anacrónica.

LA TAZA DE TÉ Y LOS ARTEFACTOS

Las relaciones personales entre los dos poetas se rompieron para siempre después de la fatídica taza de té que tomó Parra en la Casa Blanca, donde una visita turística, con otros poetas, al domicilio del presidente desembocó en una sala de recepción, en la cual la sonriente Pat Nixon los esperaba con té y fotógrafos. Por otro lado, el antipoeta defendió su independencia y se negaba a someterse ciento por ciento a las exigencias de la Unidad Popular. Artefactos, una caja de `tarjetas postales publicadas en 1972, contenía varios textos que provocaron ira tanto en la izquierda como la derecha, tales como: “HASTA CUANDO SIGUEN FREGANDO LA CACHIMBA / Yo no soy derechista ni izquierdista / yo simplemente rompo con todo”; CUBA SI / YANKEES TAMBIÉN”; “PADRE NUESTRO / Que estás en el centro / líbranos de derechas e izquierdas”. El resultado fue el ostracismo casi total de Parra dentro del mundo literario chileno. “Mi independencia cayó muy mal en la izquierda, al extremo que fui ejecutado, metafóricamente, por ellos”, afirma Parra, convencido de que Neruda estaba al centro del boicot a su persona. Posteriormente, oficiales de la dictadura mandaron quemar a Artefactos.

Más allá de las diferencias entre los dos poetas, cualquier persona que ha conversado largamente con Parra se da cuenta del gran cariño que éste guarda para Neruda, a pesar de todos los malentendidos, las envidias y los choques que son inevitables entre dos grandes escritores en el espacio tan restringido del mundo literario de Santiago. En este sentido, el poema “Cristo de Elqui deplora la muerte de Pablo Neruda”, publicado en Poesía Política con la voz de la ‘persona’ del viejo predicador, es una muestra del afecto que retiene Parra para Neruda:

“Hombres como Neruda no debieran morir /es lo que yo postulo con este poema /menos aún de cáncer a la próstata / díganme Uds. quién se beneficia / con la muerte de un genio como Neruda /¿la Virtud? ¿el Progreso? ¿la Providencia? ¡puchas con la Divina Providencia! /este es un crimen que no tiene nombre /tuvo razón el búho cuando dijo /que los hombres + bellos /son los manjares de que se nutren los dioses /el Espíritu Santo me perdone: /no comprendo /juro que no comprendo /si no fuera x esta maldita sotana /yo me suicidaría de vergüenza.

MANIFIESTO

Señoras y señores
Esta es nuestra última palabra.
-Nuestra primera y última palabra-
Los poetas bajaron del Olimpo.

Para nuestros mayores
La poesía fue un objeto de lujo
Pero para nosotros
Es un artículo de primera necesidad:
No podemos vivir sin poesía.

A diferencia de nuestros mayores
-Y esto lo digo con todo respeto-
Nosotros sostenemos
Que el poeta no es un alquimista
El poeta es un hombre como todos
Un albañil que construye su muro:
Un constructor de puertas y ventanas.

Nosotros conversamos
En el lenguaje de todos los días
No creemos en signos cabalísticos.

Además una cosa:
El poeta está ahí
Para que el árbol no crezca torcido.

Este es nuestro lenguaje.
Nosotros denunciamos al poeta demiurgo
Al poeta Barata
Al poeta Ratón de Biblioteca.

Todo estos señores
-Y esto lo digo con mucho respeto-
Deben ser procesados y juzgados
Por construir castillos en el aire
Por malgastar el espacio y el tiempo
Redactando sonetos a la luna
Por agrupar palabras al azar
A la última moda de París.
Para nosotros no:
El pensamiento no nace en la boca
Nace en el corazón del corazón.

Nosotros repudiamos
La poesía de gafas obscuras
La poesía de capa y espada
La poesía de sombrero alón.
Propiciamos en cambio
La poesía a ojo desnudo
La poesía a pecho descubierto
La poesía a cabeza desnuda.

No creemos en ninfas ni tritones.
La poesía tiene que ser esto:
Una muchacha rodeada de espigas
O no ser absolutamente nada.

Ahora bien, en el plano político
Ellos, nuestros abuelos inmediatos,
¡Nuestros buenos abuelos inmediatos!
Se refractaron y dispersaron
Al pasar por el prisma de cristal.
Unos pocos se hicieron comunistas.
Yo no sé si lo fueron realmente.
Supongamos que fueron comunistas,
Lo que sé es una cosa:
Que no fueron poetas populares,
Fueron unos reverendos poetas burgueses.

Hay que decir las cosas como son:
Sólo uno que otro
Supo llegar al corazón del pueblo.
Cada vez que pudieron
Se declararon de palabra y de hecho
Contra la poesía dirigida
Contra la poesía del presente
Contra la poesía proletaria.

Aceptemos que fueron comunistas
Pero la poesía fue un desastre
Surrealismo de segunda mano
Decadentismo de tercera mano,
Tablas viejas devueltas por el mar.
Poesía adjetiva
Poesía nasal y gutural
Poesía arbitraria
Poesía copiada de los libros
Poesía basada
En la revolución de la palabra
En circunstancias de que debe fundarse
En la revolución de las ideas.
Poesía de círculo vicioso
Para media docena de elegidos:
"Libertad absoluta de expresión".

Hoy nos hacemos cruces preguntando
Para qué escribirían esas cosas
¿Para asustar al pequeño burgués?
¡Tiempo perdido miserablemente!
El pequeño burgués no reacciona
Sino cuando se trata del estómago.

¡Qué lo van a asustar con poesías!

La situación es ésta:
Mientras ellos estaban
Por una poesía del crepúsculo
Por una poesía de la noche
Nosotros propugnamos
La poesía del amanecer.
Este es nuestro mensaje,
Los resplandores de la poesía
Deben llegar a todos por igual
La poesía alcanza para todos.

Nada más, compañeros
Nosotros condenamos
-Y esto sí que lo digo con respeto-
La poesía de pequeño dios
La poesía de vaca sagrada
La poesía de toro furioso.

Contra la poesía de las nubes
Nosotros oponemos
La poesía de la tierra firma
-Cabeza fría, corazón caliente
Somos tierrafirmistas decididos-
Contra la poesía de café
La poesía de la naturaleza
Contra la poesía de salón
La poesía de la plaza pública
La poesía de protesta social.
Los poetas bajaron del Olimpo.


Zerán, Faride. La guerrilla literaria: Huidobro, De Rokha, Neruda. Santiago: Ediciones Bat, 1992.
NICANOR PARRA O EL ARTEFACTO CON LAURELES por Mario Benedetti

30 de mayo de 2009

Violeta Parra Entrada N° 200


Defensa de Violeta Parra- Nicanor Parra


Que mejor que celebrar mi entrada N° 200 con un homenaje a Violeta Parra, Violeta del Carmen Parra Sandoval (* San Carlos de Itihue (Chile), 4 de octubre de 1917 - † Santiago, 5 de febrero de 1967) fue una cantante, pintora, escultora, bordadora y ceramista chilena, considerada por muchos la folclorista más importante de Chile y fundadora de la música popular chilena. Era miembro de la prolífica familia Parra.

El aporte de Violeta Parra al quehacer musical y artístico chileno se considera unánimemente de gran valor y trascendencia. Su trabajo sirvió de inspiración a muchos artistas posteriores, que continuaron con su ardua tarea de rescate de la música del campo chileno y las manifestaciones constituyentes del folclore del país y de Latino américa. Sus composiciones propias han sido elogiadas por críticos de todo el mundo, tanto por su compleja elaboración musical como por sus letras poéticas, ingeniosas y socialmente comprometidas. Sus canciones han sido versionadas por gran cantidad de artistas en Latino américa y el resto del mundo.
Además del gran legado de sus propias grabaciones, Violeta Parra ha sido versionada por una inmensa cantidad de músicos chilenos, entre los que se cuentan Víctor Jara, Quilapayún, Illapu, Los Jaivas, Inti Illimani (que, además de diversas grabaciones individuales de canciones de Violeta, ejecutó la obra de Luis Advis Canto para una Semilla, musicalización de las Décimas Autobiográficas de Violeta). Un tributo rock producido por Álvaro Henríquez y con la participación de artistas como Los Bunkers, Pettinellis, Lucybell, Javiera Parra, Chancho en Piedra y Juanita Parra, vio la luz en 2001 con el título de Después de Vivir un Siglo. Incluso baladistas populares como Myriam Hernández, Gloria Simonetti y Luis Jara han incorporado la música de Violeta en sus repertorios.

Pero sin duda lo que resulta un aporte real a la musica es el rescate de la tradición musical chilena: el canto a lo divino ("El rin del angelito", "Verso por una niña muerta", por ejemplo), "El lamento mapuche", sus canciones nortinas, sin dejar de lado su gran sensibilidad social en canciones como: ' "Mazúrquica modérnica", "Rodríguez y Recabarren", "La carta", etc. Por todo lo anterior ella es considerada la madre del folklor latinoamericano.

Cabe destacar en el legado musical de Violeta sus interesantes composiciones instrumentales para guitarra, donde conjuga folclorismo y modernidad.

Una gran cantidad de canciones de Violeta han sido versionadas por sus hijos Ángel e Isabel, mientras que su nieto Ángel Parra Orrego ha editado un disco con las "anticuecas" en 1994, y Tita Parra lanzó una continuación de su trabajo de "décimas", con el título de Centésimas del Alma en 1998.

En el extranjero, Violeta ha sido interpretada por artistas como Mercedes Sosa, Fito Páez, Pedro Aznar (Argentina), Elis Regina y Milton Nascimento (Brasil), Joan Manuel Serrat (España), Silvio Rodríguez (Cuba), Susana Baca (Perú), Joan Baez (Estados Unidos), Robert Wyatt (Inglaterra), entre muchos otros.






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28 de mayo de 2009

Poemas - Nicanor Parra


Nicanor Parra Sandoval (n. San Fabián de Alico, 5 de septiembre de 1914) es un poeta chileno.

A Parra se le atribuye la antipoesía, una expresión literaria que rompe con los cánones tradicionales de la lírica. Una de sus obras más reconocidas es Poemas y Antipoemas, donde reemplaza una sintaxis cuidada y metafórica por un lenguaje cotidiano y directo.

Nicanor Parra es miembro de la familia Parra, compuesta por reconocidos artistas populares en Chile, entre ellos Roberto, Violeta y Eduardo ("Lalo").


Sinfonía de cuna


Una vez andando
por un parque inglés
con un angelórum
sin querer me hallé.

Buenos días, dijo,
yo le contesté,
él en castellano,
pero yo en francés.

Dites moi, don ángel,
Comment va monsieur
Él me dio la mano,
Yo le tomé el pie
¡Hay que ver, señores,
Cómo un ángel es!

Fatuo como el cisne,
Frío como un riel,
Gordo como un pavo,
Feo como usted.

Susto me dio un poco
Pero no arranqué.

Le busqué las plumas,
Plumas encontré,
Duras como el duro
Cascarón de un pez.

¡Buenas con que hubiera
Sido Lucifer!

Se enojó conmigo,
Me tiró un revés
Con su espada de oro,
Yo me le agaché.

Ángel más absurdo
Non volveré a ver.

Muerto de la risa
Dije good bye sir,
Siga su camino,
Que le vaya bien,
Que la pise el auto,
Que la mate el tren.

Ya se acabó el cuento,
Uno, dos y tres.

De Poemas y antipoemas (Santiago, Nascimento,1954)


LULLABALOO



As I was walking in
The park one day
I chanced to run into
An angelorium.

Good morning, he said
I answered back, good day.
He was speaking Spanish
But I used French.

Dites moi, Sir Angel
Comment va monsieur.

He stretched out his hand
I grabbed his foot,
You should get a good look
At a real live angel!

As silly as a swan
As cold as a crowbar
As fat as a duck
As ugly as you.

I got a little scared
But I stuck it out.

I tried to touch his feathers
His feathers felt as
Hard as the hard
Shell of a fish,

Just think if it was
Lucifer!

I made him mad
He took a swipe at me
With his golden sword
But I was quick and ducked.

That's the looniest angel
I ever hope to see.

I laughed myself to pieces
I said, goodbye, kind sir
Be on your way.

Have a nice day
Get run over by a car,
Get killed by a train.

So that's the story of the angel.
The End.

translated by Naomi Lindstrom
traducido por Naomi Lindstrom

en: revista Latin American Literary Review, 1981.

Agnus Dei



Horizonte de tierra
astros de tierra
Lágrimas y sollozos reprimidos
Boca que escupe tierra
dientes blandos
Cuerpo que no es más que un saco de tierra
Tierra con tierra -tierra con lombrices.
Alma inmortal-espíritu de tierra.

Cordero de dios que lavas los pecados del mundo
Dime cuántas manzanas hay en el paraíso terrenal.
Cordero de dios que lavas los pecados del mundo
Hazme el favor de decirme la hora.

Cordero de dios que lavas los pecados del mundo
Dame tu lana para hacerme un sweater.

Cordero de dios que lavas los pecados del mundo
Déjanos fornicar tranquilamente:
No te inmiscuyas en ese momento sagrado.

Aprovecho la hora del almuerzo...



Aprovecho la hora del almuerzo
para hacer un examen de conciencia
¿Cuántos brazos me quedan por abrir?
¿Cuántos pétalos negros por cerrar?
¡A lo mejor soy un sobreviviente!

El receptor de radio me recuerda
mis deberes, las clases, los poemas
con una voz que parece venir
desde lo más profundo del sepulcro.

El corazón no sabe que pensar.

Hago como que miro los espejos
un cliente estornuda a su mujer
otro enciende un cigarro
otro lee Las últimas noticias.

¡Qué podemos hacer, árbol sin hojas,
fuera de dar la última mirada
en dirección del paraíso perdido!

Responde sol oscuro
ilumina un instante

aunque después te apagues para siempre.


Cambios de nombre



A los amantes de las bellas letras
Hago llegar mis mejores deseos
Voy a cambiar de nombre a algunas cosas.
Mi posición es ésta :
El poeta no cumple su palabra
Si no cambia los nombres de las cosas.
¿ Con qué razón el sol
Ha de seguir llamándose sol ?
¡ Pido que se llame Micifuz
El de las botas de cuarenta leguas !

¿ Mis zapatos parecen ataúdes ?
Sepan que desde hoy en adelante
Los zapatos se llaman ataúdes.
Comuníquese, anótese y publíquese
Que los zapatos han cambiado de nombre :
Desde ahora se llaman ataúdes.
Bueno, la noche es larga
Todo poeta que se estime a sí mismo
Debe tener su propio diccionario
Y antes que se me olvide
Al propio dios hay que cambiarle nombre
Que cada cual lo llame como quiera :
Es es un problema personal.

Cartas a una desconocida



Cuando pasen los años, cuando pasen
los años y el aire haya cavado un foso
entre tu alma y la mía; cuando pasen los años
y yo sólo sea un hombre que amó,
un ser que se detuvo un instante frente a tus labios,
un pobre hombre cansado de andar por los jardines,
¿dónde estarás tú? ¡Dónde
estarás, oh hija de mis besos!

Defensa de Violeta Parra



Dulce vecina de la verde selva
Huésped eterno del abril florido
Grande enemiga de la zarzamora
Violeta Parra.

Jardinera
locera
costurera
Bailarina del agua transparente
Árbol lleno de pájaros cantores
Violeta Parra.

Has recorrido toda la comarca
Desenterrando cántaros de greda
Y liberando pájaros cautivos
Entre las ramas.

Preocupada siempre de los otros
Cuando no del sobrino
de la tía
Cuándo vas a acordarte de ti misma
Viola piadosa.

Tu dolor es un círculo infinito
Que no comienza ni termina nunca
Pero tú te sobrepones a todo
Viola admirable.

Cuando se trata de bailar la cueca
De tu guitarra no se libra nadie
Hasta los muertos salen a bailar
Cueca valseada.

Cueca de la Batalla de Maipú
Cueca del Hundimiento del Angamos
Cueca del Terremoto de Chillán
Todas las cosas.

Ni bandurria
ni tenca
ni zorzal
Ni codorniza libre ni cautiva

solamente tú
tres veces tú
Ave del paraíso terrenal.

Charagüilla gaviota de agua dulce
Todos los adjetivos se hacen pocos
Todos los sustantivos se hacen pocos
Para nombrarte.

Poesía
pintura
agricultura
Todo lo haces a las mil maravillas
Sin el menor esfuerzo
Como quien se bebe una copa de vino.

Pero los secretarios no te quieren
Y te cierran la puerta de tu casa
Y te declaran la guerra a muerte
Viola doliente.

Porque tú no te vistes de payaso
Porque tú no te compras ni te vendes
Porque hablas la lengua de la tierra
Viola chilensis.

¡Porque tú los aclaras en el acto!

Cómo van a quererte
me pregunto
Cuando son unos tristes funcionarios
Grises como las piedras del desierto
¿No te parece?

En cambio tú
Violeta de los Andes
Flor de la cordillera de la costa
Eres un manantial inagotable
De vida humana.

Tu corazón se abre cuando quiere
Tu voluntad se cierra cuando quiere
Y tu salud navega cuando quiere
Aguas arriba!

Basta que tú los llames por sus nombres
Para que los colores y las formas
Se levanten y anden como Lázaro
En cuerpo y alma.

¡Nadie puede quejarse cuando tú
Cantas a media voz o cuando gritas
Como si te estuvieran degollando
Viola volcánica!

Lo que tiene que hacer el auditor
Es guardar un silencio religioso
Porque tu canto sabe adónde va
Perfectamente.

Rayos son los que salen de tu voz
Hacia los cuatro puntos cardinales
Vendimiadora ardiente de ojos negros
Violeta Parra.

Se te acusa de esto y de lo otro
Yo te conozco y digo quién eres
¡Oh corderillo disfrazado de lobo!
Violeta Parra.

Yo te conozco bien
hermana vieja
Norte y sur del país atormentado
Valparaíso hundido para arriba
¡Isla de Pascua!

Sacristana cuyaca de Andacollo
Tejedora a palillo y a bolillo
Arregladora vieja de angelitos
Violeta Parra.
Los veteranos del Setenta y nueve
Lloran cuando te oyen sollozar
En el abismo de la noche oscura
¡Lámpara a sangre!

Cocinera
niñera
lavandera
Niña de mano
todos los oficios
Todos los arreboles del crepúsculo
Viola funebris.

Yo no sé qué decir en esta hora
La cabeza me da vueltas y vueltas
Como si hubiera bebido cicuta
Hermana mía.

Dónde voy a encontrar otra Violeta
Aunque recorra campos y ciudades
O me quede sentado en el jardín
Como un inválido.

Para verte mejor cierro los ojos
Y retrocedo a los días felices
¿Sabes lo que estoy viendo?
Tu delantal estampado de maqui.

Tu delantal estampado de maqui
¡Río Cautín!
¡Lautaro!
¡Villa Alegre!
¡Año mil novecientos veintisiete
Violeta Parra!
Pero yo no confío en las palabras
¿Por qué no te levantas de la tumba
A cantar
a bailar
a navegar
En tu guitarra?

Cántame una canción inolvidable
Una canción que no termine nunca
Una canción no más
una canción
Es lo que pido.

Qué te cuesta mujer árbol florido
Álzate en cuerpo y alma del sepulcro
Y haz estallar las piedras con tu voz
Violeta Parra

Esto es lo que quería decirte
Continúa tejiendo tus alambres
Tus ponchos araucanos
Tus cantaritos de Quinchamalí
Continúa puliendo noche y día
Tus toromiros de madera sagrada
Sin aflicción
sin lágrimas inútiles
O si quieres con lágrimas ardientes
Y recuerda que eres
Un corderillo disfrazado de lobo.

El hombre imaginario



El hombre imaginario
vive en una mansión imaginaria
rodeada de árboles imaginarios
a la orilla de un río imaginario

De los muros que son imaginarios
penden antiguos cuadros imaginarios
irreparables grietas imaginarias
que representan hechos imaginarios
ocurridos en mundos imaginarios
en lugares y tiempos imaginarios

Todas las tardes imaginarias
sube las escaleras imaginarias
y se asoma al balcón imaginario
a mirar el paisaje imaginario
que consiste en un valle imaginario
circundado de cerros imaginarios.

Sombras imaginarias
vienen por el camino imaginario
entonando canciones imaginarias
a la muerte del sol imaginario.

Y en las noches de luna imaginaria
sueña con la mujer imaginaria
que le brindó su amor imaginario
vuelve a sentir ese mismo dolor
ese mismo placer imaginario
y vuelve a palpitar
el corazón del hombre imaginario.