Salvada por los pelos
En tiempos remotos,en los que los marineros y los piratas surcaban los mares la mayor parte de ellos no sabía nadar; más aún, había muchos hombres de mar que no podían siquiera mantenerse a flote en caso de naufragio debido a que la capacidad de nadar no era una condición "sine qua non" para ingresar como tripulante.
De ahí que, cuando un día el jefe de cierto cuerpo de la Armada, quizá guiado por razones puramente higiénicas, dio orden de rapar la cabeza de todos sus hombres, estos se alzaron en clamor de protesta y rebeldía, llegando incluso a la superioridad, alegando que la medida atentaba contra su vida, debido a que de esa manera se les privaba, en caso de naufragio, de una forma de asidero, dado que muchas veces eran salvados de una muerte segura al ser tomados de los largos pelos de su cabeza.
Una de estas quejas está recogida en una carta conservada en los archivos de la Marina, y que los artilleros de Marina Manuel Calderón y Manuel Morales dirigieron al rey José I: “Que siendo todo su estar en la mar embarcados y a cada instante vense en el eminente riesgo de poderse ahogar; y no teniendo el pelo por dónde comúnmente se favorecen asiéndose de él;… …Pues no es costumbre a los Marineros por la expuesta causa se les haya nunca cortado el pelo; y que les pueda servir de engancho o agarradero en caso de peligrar en su destino en la mar…”
Una Real Orden expedida en el mismo año derogó la medida de la obligatoriedad de cortarse el pelo.
Finalmente, podemos citar en relación con esta expresión, la existencia entre los musulmanes (o entre las capas populares en los países en que se profesa esta religión) de una curiosa creencia que está relacionada. Antes de llegar al Paraíso, los creyentes deben atravesar un puente tan fino como un hilo, bajo el cual se extiende el abismo insondable. Para evitar que caigan, un ángel los sostiene agarrándolos por el cabello. Para asegurar su supervivencia en tan delicado trance algunos fieles acostumbran a dejarse crecer un largo mechón de pelo en la frente, esperando así facilitar su tarea al ángel cuando llegue el momento decisivo.
En la actualidad, la expresión salvarse por los pelos o la variante criolla salvarse por un pelito son usadas para dar a entender que alguien logra salir de un apuro extremo, justo en el último momento.
Según la Real Academia de la lengua; Un pelo: 1. loc. adv. coloq. Muy poco. Le faltó un pelo para llegar. No acertó por un pelo
En "El péndulo de Foucault" se lee:
Pilocat basis, que es el arte de salvarse por los pelos, y no parece inútil del todo. ¿Verdad?
De ahí que, cuando un día el jefe de cierto cuerpo de la Armada, quizá guiado por razones puramente higiénicas, dio orden de rapar la cabeza de todos sus hombres, estos se alzaron en clamor de protesta y rebeldía, llegando incluso a la superioridad, alegando que la medida atentaba contra su vida, debido a que de esa manera se les privaba, en caso de naufragio, de una forma de asidero, dado que muchas veces eran salvados de una muerte segura al ser tomados de los largos pelos de su cabeza.
Una de estas quejas está recogida en una carta conservada en los archivos de la Marina, y que los artilleros de Marina Manuel Calderón y Manuel Morales dirigieron al rey José I: “Que siendo todo su estar en la mar embarcados y a cada instante vense en el eminente riesgo de poderse ahogar; y no teniendo el pelo por dónde comúnmente se favorecen asiéndose de él;… …Pues no es costumbre a los Marineros por la expuesta causa se les haya nunca cortado el pelo; y que les pueda servir de engancho o agarradero en caso de peligrar en su destino en la mar…”
Una Real Orden expedida en el mismo año derogó la medida de la obligatoriedad de cortarse el pelo.
Finalmente, podemos citar en relación con esta expresión, la existencia entre los musulmanes (o entre las capas populares en los países en que se profesa esta religión) de una curiosa creencia que está relacionada. Antes de llegar al Paraíso, los creyentes deben atravesar un puente tan fino como un hilo, bajo el cual se extiende el abismo insondable. Para evitar que caigan, un ángel los sostiene agarrándolos por el cabello. Para asegurar su supervivencia en tan delicado trance algunos fieles acostumbran a dejarse crecer un largo mechón de pelo en la frente, esperando así facilitar su tarea al ángel cuando llegue el momento decisivo.
En la actualidad, la expresión salvarse por los pelos o la variante criolla salvarse por un pelito son usadas para dar a entender que alguien logra salir de un apuro extremo, justo en el último momento.
Según la Real Academia de la lengua; Un pelo: 1. loc. adv. coloq. Muy poco. Le faltó un pelo para llegar. No acertó por un pelo
En "El péndulo de Foucault" se lee:
Pilocat basis, que es el arte de salvarse por los pelos, y no parece inútil del todo. ¿Verdad?
Salvado por un pelo
chile
CURIOSO EL ORIGEN DE LAS EXPRESIONES QUE USAMOS, GRACIAS POR TU EXPLICACION.
ResponderBorrarSALUD.
Saludos.Esta noche he aprendido algo más.
ResponderBorrarpufff espero que no haya muchos musulmanes calvos!
ResponderBorrarno lo sabía, gracias Ulysses
ResponderBorrar:=))te quedó de pelos!!
ResponderBorrary lo digo sin pelos en la lengua,
muakismuakis:=)
Genial tu entrada de hoy...y genial la foto de cabecera :))))
ResponderBorrarSaludos Uly!
No tenía idea Ulyses, ahora ya sé el origen de esa frase.
ResponderBorrarLas fotos un buen ejemplo, de salvarse por un pelo :)
Envenezolano se dice:"Le faltó un pelo de cuca"...jajajaja
ResponderBorrarSalud
Me gustó!!!! Ulysses, eso me gusta. saber de donde vienen los dichos o cual es la explicación de ellos. No tenía idea que se trataba de esto. Interesante. Muy interesante.
ResponderBorrarAunque yo creo que lo que dice Elisa se refiere al almíbar de pelo.
Saludos.
Tenemos infinidad de expresiones que no sabemos de donde vienen ni a donde van, el "Salvarse por los pelos" es una de ellas y muy habitual, me ha parecido muy interesante tu Post.Saludos.
ResponderBorrarEs bien curioso que usemos tantas y tantas expresiones sin saber el origen y sin preguntárnoslo.
ResponderBorrarA veces me he parado a pensarlo pero...
Gracias por acercarnos ésta que es bien curiosa, e incluso, casi romántica.
Bicos.
todos los dias aprendemos algo, gracias por tu clase sobre el tema del pelo que no conocia.
ResponderBorrarUn abrazo
yo me inscribi como seguidora de tu blog...gracias por tu visita.
ResponderBorrarun abrazo
Marina
Es cierto que por un pelo pueden ocurrir muchas cosas, ese pelo es necesario en todo lo bueno con él podremos hacer muchísimas virtudes y encontrar muchas metas, ese pelo hay que ponerlo para que no digamos por un pelo perdí el tren
ResponderBorrarSaludos, conversando con otros amigos he dado con tu casa.
Hola, vengo a agradecer tu visita a mi blog y dar una miradita aqui, tienes un blog instructivo, esta frase a la que aludes, salvarse por los pelos, no tenía ni idea de su origen, estupenda la información, encantada de conocerte, saludos afectuosos
ResponderBorrarEstoy liquidado. Apenas me queda pelo... y tampoco se nadar.
ResponderBorrarMuy instructivo, estimado Ulysses, el post.
GRACIAS Y ME QUEDO, AMIGO
ResponderBorrar♥
ResponderBorrarMuy interesante, aquí también decimos 'salvarse por un pelito'
♥♥
Yo si traigo el cabello largo...por si acaso...
ResponderBorrarGracias por visitarme, saludos.
Hola, todo bién ...
ResponderBorrarMiré muy interesante tu blog.
Gracias por la visita.
Saludos.
Sill
Interesantisimo lo expuesto, siempre es bueno conocer antecedentes de dichos tan mundanos.
ResponderBorrarSaludos
Parece obvio en nuestros tiempos que, para siquiera acercarse al Mar como parte de un oficio o profesión, hay que saber nadar; pero antes, era igualmente obvio que ese conocimiento no era necesario.
ResponderBorrarInteresante origen de la expresión "salvado por los pelos"...aunque, por desgracia, en tierra el largo del pelo no te salvaba en un tiempo (fácilmente se era considerado sospechoso y detenido).
Saludos afectuosos, de corazón.