No hay preguntas más apremiantes que las preguntas ingenuas. |
El ocaso del siglo
Tenía que ser mejor que los anteriores, nuestro siglo XX.Ya no esta a tiempo de demostrarlo,
tiene los años contados,
andar vacilante,
respiración corta.
Han sucedido demasiadas cosas
que no debieron suceder,
y lo que tenía que llegar
no ha llegado.
Tenía que estallar la primavera
y, entre otras cosas, la felicidad.
El miedo tenía que abandonar valles y montañas.
La verdad tenía que ser más veloz que la mentira
en alcanzar el blanco.
Algunos desastres
no debieron repetirse,
por ejemplo la guerra,
el hambre, etcétera.
Tenía que respetarse
la indefensión de los indefensos,
la confianza y cosas por el estilo.
Quien deseaba complacerse en este mundo
se enfrenta a una hazaña irrealizable.
La estupidez no es ridícula.
La sabiduría no es alegre.
La esperanza
dejó de ser una muchacha,
etcétera, por desgracia.
Dios tenía que confiar, por fin, en el hombre
bueno y fuerte,
pero un bueno y un fuerte
siguen siendo dos hombres.
Como vivir, me preguntó por carta alguien
a quien yo pensaba formular
la misma pregunta.
De nuevo y como siempre,
según lo dicho anteriormente,
no hay preguntas más apremiantes
que las preguntas ingenuas.
Wislawa Szymborska
HOMBRES EN EL PUENTE, 1986)
Traducción de Ana María Moix y Jerzy Wojciech Slawomirsky
Si los años se pudieran medir, o pesar, saber su calidad, ayudaría para la calificación...
ResponderBorrarSalud
Si.
ResponderBorrarBesos mil.
Muy verdadero y profundo.
ResponderBorrarBuen Domingo
"no hay preguntas más apremiantes
ResponderBorrarque las preguntas ingenuas"; preguntas llenas de lucidez...
"Un hombre bueno y fuerte...siguen siendo dos hombres"...
ResponderBorrarY como esto siga así, y como sigamos fomentando la envidia, el egoísmo y la codicia, no serán ni dos hombres. Tan sólo será uno, "el fuerte" pues el bueno - y a mi pesar - habrá desaparecido para siempre.
Y un saludo
Muy bonito y muy verdadero.
ResponderBorrarSaludos,